Una de las mayores falacias de la historia del rock es la impuesta simetría entre The Beatles y el Big Bang: antes no había nada y ellos aparecieron, del mismo modo, expandiéndose y generando cientos de imitadores, fans, críticos, bandas tributo, grupos que surgieron a partir de su música y más, en diversas épocas, momentos y países. Esta idea instaurada es, por lo menos, exagerada. Antes de The Beatles sí hubo bandas, los fundadores del rock ‘n’ roll en Estados Unidos, y no solo eso, también varios grupos en Gran Bretaña que se encargaron de forjar las bases del género en ese país, con su versión local del estilo llamado skiffle. Si bien este género es originalmente gringo y surgió en los años veinte, tuvo mayor popularidad en el viejo imperio treinta años después. La mezcla de sonidos americanos como el jazz, blues y country fue reinterpretada a gusto y dio lugar a artistas como el escocés Lonnie Donegan.
Como un rockabilly chueco, el skiffle se impuso y motivó a diversos muchachos a armar sus propios grupos, entre ellos a un joven John Lennon, quien conformó la banda The Quarrymen, en la que mezclaba un duro rock ‘n’ roll con skiffle.
Era 1956 y Lennon, junto a otros compañeros del colegio armaron la banda originalmente llamada The Blackjacks, pero cambiaron su nombre antes de llegar a tocar en vivo. Para 1957 se sumó Paul McCartney y para 1958 George Harrison, quien tenía tan solo 14 años. Su primera grabación fue un single conformado por «That Will Be The Day», hit de su amado Buddy Holly, ese músico nerd de anteojos que era lo suficientemente poco atractivo para motivarlos a intentar hacer una banda.
«In Spite of All Danger», el otro tema que compuso el primer single del grupo, es de las primeras canciones originales de John Lennon. Desde ese primer inicio ya jugaban con armonías vocales y trucos de estudio (como poner una bufanda en un tambor para disminuir su volumen), pero musicalmente estaban muy emparentados al rock melódico de amor de la época, cercano a Buddy Holly o John Leyton.
La banda se separaría al poco tiempo debido a la muerte de la madre de Lennon, pero para 1960 se volvería a formar, primero con el nombre de The Silver Beatles. Por suerte hay grabaciones que documentan esta época primitiva del grupo que cambió el curso de la historia del rock, como tantos otros.
Para 1964 la banda se alía con el cantante británico Long John Baldry y conforman un supergrupo que se presentó por única vez en 1964, cuando The Beatles ya eran The Beatles. Lo interesante es que en 1962 Baldry cantó en el que se considera el primer disco de rhythm and blues británico y en sus presentaciones tocaba con todos los integrantes de The Rolling Stones.
Para 1997 los integrantes vivos de ese primer grupo, The Quarrymen, se reunieron a modo de tributo para festejar el momento en que Lennon y McCartney se conocieron. El entusiasmo fue tal que al día de hoy siguen pataleando sobre escenarios.
Todo tiene un inicio, nada aparece de la nada. The Beatles tuvo sus años de ruta, desprolijidad y duro esfuerzo como cualquier otra banda de la historia. Pero luego se convirtieron en lo que fueron y en lo que son.
La moraleja es, como nos quisieron imponer hace unos años, que tu banda, salida de Myspace, puede ser los próximos Beatles. ¡A intentar!